Son numerosos los efectos positivos que el ejercicio físico tiene sobre la salud del organismo. No obstante, hoy nos centraremos en cómo influye el deporte en el sistema digestivo.
En concreto, vamos a enumerar cinco beneficios del deporte en el sistema digestivo:
Mejora el tránsito intestinal.
Existen evidencias de que el ejercicio aeróbico tiene efectos positivos sobre los síntomas del estreñimiento. Además, son diversos los estudios que han asociado bajos niveles de actividad física con una mayor prevalencia del estreñimiento.
Mejora el control del apetito.
Se ha demostrado que el ejercicio físico tiene efectos positivos sobre las hormonas asociadas con la ingesta de alimentos y el apetito. Diferentes investigaciones han reflejado que las personas sedentarias tienen una peor regulación de la ingesta de energía, lo cual puede favorecer un balance energético positivo y como consecuencia un incremento de la masa grasa.
Por el contrario, las personas con mayores niveles de actividad física han demostrado tener una mejor regulación de los sistemas de control del apetito.
Mejora la microbiota intestinal
Y te preguntarás, ¿Qué es la microbiota intestinal? La microbiota intestinal es una comunidad de microorganismos que habitan en el tracto gastrointestinal. Se ha evidenciado que la microbiota intestinal sana influye de forma positiva sobre el sistema inmunológico, el rendimiento cognitivo, y además, protege contra microorganismos potencialmente patógenos.
Asimismo, la relación entre la composición de la microbiota intestinal y el ejército físico aparenta ser bidireccional. Son crecientes los estudios que han reflejado el papel que la microbiota intestinal ejerce sobre el rendimiento físico de los deportistas. Pues parece ser, que la composición y actividad metabólica de esta puede ayudar en la digestión de los componentes de la dieta y en la producción de energía durante la práctica de ejercicio.
Por el contrario, las personas con mayores niveles de actividad física han demostrado tener una mejor regulación de los sistemas de control del apetito.
Tiene impacto positivo sobre la función cerebral.
En línea con lo anterior, recientes evidencias reflejan que el ejercicio aeróbico mejora la abundancia y diversidad de especies de la microbiota intestinal que tienen un efecto positivo sobre el cerebro. Esto podría explicar el efecto positivo que percibimos a nivel psicológico cuando practicamos deporte.
Asimismo, la relación entre la composición de la microbiota intestinal y el ejército físico aparenta ser bidireccional. Son crecientes los estudios que han reflejado el papel que la microbiota intestinal ejerce sobre el rendimiento físico de los deportistas. Pues parece ser, que la composición y actividad metabólica de esta puede ayudar en la digestión de los componentes de la dieta y en la producción de energía durante la práctica de ejercicio.
Por el contrario, las personas con mayores niveles de actividad física han demostrado tener una mejor regulación de los sistemas de control del apetito.
Disminuye la inflamación intestinal.
Se ha demostrado que el ejercicio físico moderado ayuda a disminuir la inflamación y la permeabilidad intestinal.
No obstante, también cabe mencionar que si practicamos ejercicio físico en exceso y de forma muy intensa podemos conseguir todo lo contrario. Esto es debido a que el ejercicio físico intenso puede aumentar la permeabilidad intestinal y facilitar la entrada de patógenos en el torrente sanguíneo, lo cual puede ocasionar un incremento de los niveles de inflamación.
Asimismo, la relación entre la composición de la microbiota intestinal y el ejército físico aparenta ser bidireccional. Son crecientes los estudios que han reflejado el papel que la microbiota intestinal ejerce sobre el rendimiento físico de los deportistas. Pues parece ser, que la composición y actividad metabólica de esta puede ayudar en la digestión de los componentes de la dieta y en la producción de energía durante la práctica de ejercicio.
Por el contrario, las personas con mayores niveles de actividad física han demostrado tener una mejor regulación de los sistemas de control del apetito.
Tal y como hemos comentado, existen deportistas que sufren problemas digestivos durante la práctica de deportes de resistencia. Este es el caso de las personas que realizan ultramaratones, quienes con frecuencia padecen problemas digestivos e incluso pueden llegar a sufrir sangrado gastrointestinal tras una ultramaratón.
También resulta importante mencionar, que es aconsejable dejar pasar un tiempo desde la última comida antes de realizar ejercicio. Y la pregunta es ¿Cuánto tiempo debo esperar para hacer una adecuada digestión antes de practicar deporte?. Pues lo cierto es que se aconseja esperar entre 3 y 4 horas desde la última ingesta.
Sin embargo, si un par de horas antes de realizar ejercicio sientes que te falta energía, una muy buena opción para recargar fuerzas puede ser el consumo de frutas de fácil digestión como la manzana, el plátano o la pera. Esto le permitirá a tu cuerpo tener las reservas de glucógeno lo suficientemente llenas para rendir al máximo durante la práctica de actividad física.
Por lo tanto, hoy hemos podido comprobar los evidentes beneficios que tiene el ejercicio regular sobre el aparato digestivo. El cual nos ayuda a evitar molestias digestivas comunes como el estreñimiento o la inflamación digestiva, entre otras.
También resulta importante mencionar, que es aconsejable dejar pasar un tiempo desde la última comida antes de realizar ejercicio. Y la pregunta es ¿Cuánto tiempo debo esperar para hacer una adecuada digestión antes de practicar deporte?. Pues lo cierto es que se aconseja esperar entre 3 y 4 horas desde la última ingesta.
Sin embargo, si un par de horas antes de realizar ejercicio sientes que te falta energía, una muy buena opción para recargar fuerzas puede ser el consumo de frutas de fácil digestión como la manzana, el plátano o la pera. Esto le permitirá a tu cuerpo tener las reservas de glucógeno lo suficientemente llenas para rendir al máximo durante la práctica de actividad física.